Se habla mucho de la colaboración con clientes y básicamente la colaboración con proveedores es justamente lo mismo pero desde el otro lado de la moneda ¿Qué sucede si yo como cliente quiero colaborar con un proveedor? ¿Que beneficios puede tener?
Básicamente es posible colaborar bajo 3 esquemas de manera tradicional:
- Reducción de costos: Buscamos que esta colaboración nos de un mejor precio en insumos como en servicios.
- Mejora de procesos: Cuando un cliente colabora de manera interna, se puede llegar a acuerdos que faciliten los procesos de venta y recepción de los clientes.
- Innovar en productos y procesos. Una de las formas en las que los productos pueden innovarse es con una buena colaboración interna ya que permite conocer puntos de vista, compartir aprendizajes y desaciertos en el desarrollo y cadenas de suministro.
¿Qué se necesita para colaborar con sus proveedores?
Hay varios pasos que se deben seguir para la colaboración con sus proveedores y prácticamente depende de su gestión en el departamento donde se encuentre y claro es casi seguro que, sea dentro de la cadena de suministro, sin embargo, podemos definir 4 en general.
Definir alcances del proyecto
Se dice que 9 de cada 10 departamentos de compras, no cuentan con un registro claro o con una carpeta que muestre los objetivos del periodo que cursan. El trabajo colaborativo surge de esta planeación con la necesidad de actuar según las necesidades que tenga en el mercado donde se desarrolle.
En términos más terrenales, es que el trabajo colaborativo con proveedores surge de su estrategia, no de únicamente querer reducir los precios de la mercancía o servicios que le proveen.
Estructurar un equipo multidisciplinario
El Paso 2 es que al momento que tenemos el objetivo claro es momento de formar su equipo. En B2B negocios tenemos las herramientas necesarias para hacer que sus colaboradores tengan un amplio portafolio de acciones administrativas, no obstante, la colaboración va más allá y permite que el equipo pertinente como los desarrolladores de producto, de software o de servicios se limite y atribuya la responsabilidad de diseñar e integrar el proyecto de colaboración.
Esto debe ser tratado como un proyecto sólido, con objetivos, tiempos, atribuciones y responsabilidades de ambas partes. Sobre todo tener en cuenta que la colaboración va a permitir que ambas partes gocen de un buen aprendizaje creciendo en experiencia pero en relación comercial también.
Integración de los proveedores al trabajo colaborativo.
Partiendo de los trabajos colaborativos es importante tener en cuenta dos puntos: a) el trabajo colaborativo debe integrar al personal del equipo multidisciplinario pero también al personal de evaluación, calidad, marketing etc. Son los que, a través de la estrategia elegida van a aprovechar el resultado y generar algo interesante, quizá no participan activamente en el desarrollo pero deben estar ahí presentes.
Y b) la dirección del proyecto debe integrar, no solo colaborar con el proveedor. Esto significa poder obtener información importante, proporcionar información importante del proceso, ya que casi siempre es más importante mantener el trabajo colaborativo que el resultado en sí. Si el trabajo colaborativo va a tener un impacto importante es recomendable poder integrar contratos o políticas necesarias para evitar malentendidos.
Implementar y hacer una evaluación de la estrategia.
El paso final siempre es la implementación pero también establecer mecanismos de evaluación que permitan colaborar de forma precisa encaminando a los objetivos y desde la planeación o planeación estratégica del mismo. Esto debe hacerse conforme a los lineamientos y directrices del proceso previamente establecido.